Si consideramos que las personas pasan gran parte del día en sus puestos de trabajo, el confort visual y la regulación de la luz a lo largo de la jornada es importante. La iluminación para espacios de trabajo, conocida como iluminación laboral, es la encargada de resolver de la mejor forma las necesidades lumínicas concretas de cada trabajo, adaptándose a los cambios de luz durante el día, mejorando el rendimiento, proporcionando bienestar y cuidando la salud.
El nivel de iluminación óptimo para una tarea determinada corresponde al mayor rendimiento con una minima fatiga. El principal desafío es encontrar el balance entre los gastos de instalación y mantenimiento con la funcionalidad y riqueza visual.
Para obtener una iluminación precisa podemos recurrir a sistemas uniformes, localizados y mixtos.
¿Qué es la iluminación uniforme?
Es la iluminación repartida regularmente por todo el lugar, sin tener en cuenta los emplazamientos de los puestos de trabajo. Se logra asegurando que el nivel medio de iluminación sea igual al requerido para realizar correctamente las tareas.
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¿Qué es la iluminación localizada?
Permite distribuir la luz de forma regular como la iluminación uniforme, pero la ubicación de las luminarias deben estar muy bien estudiadas para conseguir una luz adecuada. Puede utilizar iluminación natural como artificial, permitiendo crear intervalos lumínicos e intencionar ciertos espacios.
HofmanDujardin Office Villa / HofmanDujardin
The Green Studio / Fraher Architects
¿Qué es la iluminación mixta?
Es la iluminación uniforme con iluminación localizada de apoyo. Se logra utilizando focos lumínicos cerca de los puestos de trabajo, reforzando la iluminación general.
Dongsi 5Lmeet / DAGA Architects
Nota del editor: Este artículo fue publicado originalmente el 27 de septiembre de 2019.
